Cinco jóvenes del grado undécimo quieren demostrar mediante una serie de encuestas y estudios médicos, cómo el uso autónomo que se le da a algunos medicamentos, puede afectar los aspectos psicológicos y fisiológicos en niños de seis y once años de edad.
El proyecto busca mejorar la salud, el desarrollo físico y mental de los escolares, determinando, en primera instancia, la manera en que los medicamentos AINEs (Antiinflamatorios no esteroides) tales como: ibuprofeno, acetaminofén y aspirinas, perjudican a los más pequeños de la institución educativa desde distintos ámbitos.
Los fármacos antiinflamatorios no esteroideos (AINEs) son un grupo de medicamentos ampliamente usados para tratar el dolor, la inflamación y la fiebre. En este grupo se incluyen medicamentos tan conocidos y usados como el ácido acetil-salicílico (AAS) (Aspirina®), ibuprofeno, indometacina, diclofenaco, piroxicam, etc.
Juan Carlos Gómez Zuleta, de 11° 1; Camilo Zapata Castrillón, de 11º 6; Santiago Zea Gutiérrez, de 11° 7; Samir Eduardo Colpas González y Daniel Humberto Morales Ruiz, de 11° 5; son los estudiantes que demostrarán con su investigación las consecuencias que puede traer el mal uso de los AINEs, para llegar a una conclusión que les permita promover el uso adecuado de estos productos farmacéuticos.
Según el Ministerio de Salud y Protección Social, en el país, la utilización inapropiada de los medicamentos y las prescripciones no autorizadas, son una constante que afecta a toda la población. Los riesgos de la automedicación son bien conocidos y se ha ilustrado a todos los ciudadanos con respecto al tema; a pesar de esto, la venta de medicamentos sin receta se ha convertido en una costumbre.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, el 6% de los medicamentos que se prescriben son dispensados de manera libre en la mayoría de farmacias, es el caso del Ibuprofeno, que, al ser el segundo medicamento más vendido en Colombia, se convierte en el principal foco de estudio para estos jóvenes.
Para el estudiante de Medicina y actual Monitor en el área de Urgencias, Emergencias y Desastres de la Hospital Universitario de la Universidad Pontificia Bolivariana, Sebastián Calle Díaz, “El tema de la automedicación en los niños y la población pediátrica es muy grande, porque existe poca regulación en los medicamentos y cualquier persona puede ir y comprar”. Añadió además que, “Los pacientes y padres de familia, prefieren seguir el consejo o ejemplo de las demás personas y deciden automedicar”.
Las distintas entidades del campo de la salud, coinciden en que la automedicación puede traer consigo efectos adversos, que van desde una simple reacción alérgica hasta la muerte. Por tal razón, los escolares buscan generar estrategias que mejoren el desempeño académico de los niños y niñas, cuando estos se ven afectados por el consumo indebido de fármacos.
Por: José Luis Tapias Ferrer, Agencia de Noticias Colegio de la UPB