UPB le apuesta a una salud mental integral

Disponible en:Medellín12 ene. 2021

Agencia de Noticias UPB – Medellín. El cuidado de la salud mental es un acto de responsabilidad de las empresas, en especial cuando son de tipo educativa. Tanto para empleados administrativos como para profesores y estudiantes puede ser un reto gestionar las actividades diarias de la vida universitaria, equilibrando las responsabilidades con la gestión emocional de cada individuo

 
Salud Mental

 

La Universidad Pontificia Bolivariana, consciente de los retos que pueden enfrentar sus colaboradores en este tema, mediante la Resolución Rectoral General 073 del 12 de noviembre de 2020, creó el Comité de Salud Mental y adoptó el Modelo de Acompañamiento en Salud Mental. Desde la Rectoría General se tomó esta decisión considerando que las dinámicas sociales y personales se encuentran en constante cambio y que se requiere un modelo de acompañamiento que favorezcan la intervención en situaciones de riesgo asociados con la salud mental de toda la comunidad universitaria desde el modelo pedagógico de la institución. 

Para esto, la UPB construyó su propia definición de salud mental, considerando el amplio marco normativo que hay y algunas definiciones, como la de la Ley 1616 de 2013 y la de la Organización Mundial de la Salud. La Universidad, entonces, define salud mental como:

Una experiencia subjetiva de bienestar psicosocial que permite reconocer las capacidades y estrategias propias en aras de lograr adecuadas relaciones sociales en los diferentes ámbitos de la vida, desempeñarse de forma productiva y contribuir a sus comunidades”. 

Considera que es de carácter dinámico y se puede ver expresada en el comportamiento, la cognición y las emociones en las interacciones cotidianas. Se consideraron varios principios orientadores: el reconocimiento y respeto por cada una de las personas, compromiso y participación, priorización, promoción y prevención y finalmente una perspectiva multidisciplinaria. 

Si bien la formación de la mesa es de gran relevancia para el cuidado de la salud mental, no es la única acción que ha tomado la UPB en este ámbito. María del Tránsito Giraldo, psicóloga y coordinadora preventiva del Centro de Familia, explica que se cuenta con estructuras, unidades y dependencias que trabajan en torno a la salud mental:

No es un asunto de ahora, si no que desde la misma concepción de la universidad se posibilita el abordaje de la salud mental”, comenta Giraldo.

 

 
Salud Mental

 

Destaca la Facultad de Psicología; la Clínica Universitaria Bolivariana, que ya tiene 25 años; el Centro de Atención Psicológica (CAP), que ha estado al servicio de la comunidad por 31 años; a Bienestar Universitario, con su programa de atención psicosocial; a Gestión Humana, donde se cuenta con profesionales en psicología que apoyan esta labor; y también al comité de seguridad y salud en el trabajo (CSST), que tiene un espacio donde se hace un estimado de los riesgos psicosociales de los empleados de la Universidad.

Bienestar Universitario convocó a estas mismas unidades para fortalecer el trabajo en salud mental al interior de la Universidad. Casualmente esto coincidió con la contingencia generada por el nuevo coronavirus, lo cual supuso un reto y nuevas perspectivas para abordar en el comité. En este proceso también hubo acompañamiento de Rectoría General, vicerretoría Pastoral, dirección de docencia, transiciones educativas, gestión de riesgos, la Facultad de Medicina y de Enfermería y del Colegio de la UPB. 

El Comité se encargará de diseñar y hacerle seguimiento a estrategias de prevención, mitigación y superación de riesgos en salud mental; también se procurará articular diferentes unidades de la institución para implementar los proyectos que se planteen. Asimismo, se diseñará, validará y socializará la ruta de atención a salud mental y emergencias psicológicas y se plantearán investigaciones sobre el tema. También, respecto a las conexiones externas, se hará validación constante de la normativa que haya y se buscarán alianzas interinstitucionales.

Sin embargo, Isabel Isaza, docente de la facultad de Psicología y consejera de los estudiantes de psicología, explica que se espera que se pueda potencializar la discusión interdisciplinaria para aportar desde la academia y la investigación al abordaje de la salud mental de la UPB. De esta manera se pretende articular los esfuerzos que se venían haciendo de manera aislada para hacer unos procesos más contextualizados y pertinentes a las necesidades que van emergiendo. María del Tránsito también aclara que más que ser una unidad operativa, el comité se encarga de la articulación de los esfuerzos que se hacen en salud mental a nivel multicampus desde las diferentes unidades.  

 

 
Salud Mental

 

El modelo de acompañamiento en salud mental considera 3 componentes principales: el estratégico, de gestión del conocimiento y la mesa estudiantil de salud mental. El primero se plantea 3 líneas de trabajo: académica e investigativa, gestión administrativa y comunicacional. El componente de gestión del conocimiento propone gestionar diversas mesas de trabajo con el objetivo de plantear proyectos que permanezcan en el tiempo; serán 5 mesas de trabajo: relacional, situaciones de riesgo asociadas a la salud mental, procesos académicos y salud mental, procesos laborales y salud mental. 

La mesa estudiantil de salud mental se plantea como “una propuesta colaborativa que se centra en el poder de la palabra de los estudiantes en temas de su propia estabilidad emocional”. Plantea como eje principal 3 cristerios: reconocimiento, identificación, cocreación. Es decir, que a través de la voz de los estudiantes se harán procesos de caracterización para diseñar estrategias adecuadas y efectivas para el cuidado de la salud mental.

Esta iniciativa está relacionada con el foco de humanización y cultura de salud de la UPB; allí hay una línea dedicada a la salud mental y contextos. Isabel explica que a partir de esto comienzan a salir alianzas académico – investigativas sobre este tema. También comenta que para esto hay un líder de cada seccional para una adecuada articulación multicampus.  

Por Ana Isabel Gómez Molina. Agencia de Noticias UPB. 

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