Agencia de Noticias UPB – Medellín. Ante la incertidumbre que actualmente vive el sector deportivo, la psicología deportiva se muestra como una alternativa en este campo para brindar soluciones de inteligencia emocional y, a través de esta, recuperar la fortaleza no solo de jugadores de alto rendimiento, sino también de aquellas personas que ven en esta práctica una vía para entrenar la mente y el cuerpo.
De acuerdo con Weinberg y Gould en su obra Fundamentos de la psicología del deporte y el ejercicio físico, la psicología del deporte es un área de la psicología aplicada que se centra en el estudio científico de la personalidad y el comportamiento en el contexto del deporte y la actividad física.
“Como disciplina científica, aplicada directa o indirectamente, estudia el comportamiento deportivo, desde tres niveles interdependientes en términos de la neurociencia: emocional, cognitivo y el comportamental”, explicó Amalia Revuelta, CEO de Lateralidad en Psicología Deportiva y docente de la diplomatura en Psicología del Deporte, Bienestar y Salud de la UPB.
Amalia hace alusión a que hoy en día la psicología del deporte no se centra solo y específicamente en jugadores de alto rendimiento, sino que sus ramas tienen un contexto mucho más amplio con abundantes áreas de intervención.
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A través de la psicología deportiva se conoce mejor las circunstancias y necesidades psicológicas de los deportistas, de esta forma se puede llegar a intervenir con técnicas y procedimientos de la psicología aplicada al deporte a fin de potenciar el rendimiento, mejorar y optimizar los resultados.
En muchas ocasiones el entrenador es quien tiene la responsabilidad de preparar psicológicamente a los deportistas y ellos también pueden formarse en este campo.
Las funciones dependerán siempre del contexto en el cual se encuentra laborando el psicólogo deportivo. Dependiendo de cuál sea el área de trabajo se planificará una intervención, ya que las necesidades de un deportista de alto rendimiento, a uno de iniciación temprana, o bienestar y salud no serán las mismas, sin embargo, hay habilidades que se trabajan de manera genérica en todos los campos de esta área como: evaluar, asesorar, planificar, prevenir.
Según Amalia, actualmente los ámbitos o campos de actuación más relevantes de la psicología deportiva son:
Desde este ámbito se trabaja todo lo relacionado al autocontrol y estrategias de visualización; entrenamiento en atención y concentración desde aspectos como lo cognitivo, motivacional y emocional, y se realizan programas de visualización para controlar el estrés competitivo y la toma de decisiones, entre otros.
A través de este campo se crean estudios de aspectos psicológicos claves en la competición y entrenamiento, además de programas psicológicos adaptados a los distintos deportes y circunstancias psicológicas concretas del deportista.
Este ámbito busca crear investigaciones sobre detección de talentos deportivos y sobre predicción del éxito deportivo.
La psicología deportiva dispone de una serie de estrategias para trabajar en sí mismo, los cual otorga un conjunto de beneficios muy diferentes a los que la medicina tradicional ya brinda.
La psicología deportiva brinda una serie de claves para reforzar la mejora constante del ser, y raíz de esta afrontar de una manera óptima los miedos, las preocupaciones, o cualquier dificultad que el deportista este viviendo.
El deportista sabe que para poder cumplir los objetivos que se ha propuesto va tener que saber desarrollar estrategias mentales para controlar cualquier situación o nivel de presión en el que tenga que competir, la diferencia radica en el carácter o la personalidad de cada uno, teniendo en cuenta que existen diferentes variables psicológicas: motivación, activación, estrés, atención, concentración y capacidad de decisión.
De modo que la psicología deportiva cumple un papel fundamental al controlar síntomas comunes que han sufrido los deportistas principiantes y experimentados en estos tiempos de confinamiento como: trastornos de ansiedad, dificultad para dormir y preocupación por el futuro de sus carreras, es por eso que en este momento la psicología del deporte no se centra en obtener buenos resultados, sino en fortalecer las disciplinas para estar preparados al momento de retornar las labores.
Finalmente, Amalia concluyó que “este tiempo de pandemia ha servido en los jugadores para definir las debilidades, de esta manera trabajar en ellas y reforzarlas, ha sido un tiempo valioso”.
Por Jessenia Ruiz García, Agencia de Noticias UPB.
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