Performance coral, un espacio donde los sueños se vuelven realidad
Agencia de Noticias UPB – Medellín. El 17 de septiembre de se llevó a la cabo la ceremonia en la que se reconoció al grupo Performance Coral como el ganador del tercer puesto en el VII Festival de coros universitarios, organizado por el Colegio Mayor de Antioquia. Sus miembros destacan los retos y las oportunidades que ha representado la necesidad de continuar con el grupo en la virtualidad.
A la premiación asistieron diversos personajes destacados de la ciudad por su trabajo en coros, como docentes y en general en favor de la cultura. Entre ellas, Grace Jiménez, quien actualmente es directora del coro de la dirección Seccional de Salud de Antioquia y también uno de los jurados del concurso, destaca que “a pesar de la cuarentena, a pesar de este lío en el que hemos estado metidos tantos meses, los coros continuaron con su trabajo”. Performance Coral no fue la excepción en este proceso de adaptación para dar continuidad a la vida artística y a la creación, tan necesaria para el bienestar del ser humano.
La posibilidad de formar armonías
Ninguno de los integrantes se esperaba obtener un premio en este festival. De hecho, se hizo más como uno de los ejercicios a los que recurrió Carlos Restrepo, el director del coro, para mantener al grupo activo en los ensayos durante el aislamiento. Cuando se le pregunta por el proceso de preparación, explica que fue la cuarentena en sí misma.
Explica que es importante recordar que los coros son grupos de personas que unen sus voces para formar una sola en armonía. Entonces, explica que la preparación para el concurso fue un asunto de “no pasar por alto lo que nos hace en lo cotidiano”, es decir, los ejercicios semanales que estaban realizando y del que se desencadena el montaje de la obra Mi pueblo chico, canción con la que ganaron en el Festival.
Joan Mogollón, bajo tenor en el coro y el encargado de sus redes sociales, asegura que fue la canción perfecta para presentarse al concurso, pues hicieron un montaje en el que quisieron mostrar que hay muchas formas de pueblo en todas partes. Explica que como performance quisieron mostrar un pueblo diferente cada uno.
Joan, cuando entró a la Universidad en 2017 a estudiar Licenciatura en inglés y español a distancia, no sabía de la existencia de los coros, pero tenía claro que quería hacer algo con la música porque siempre ha sido un tema importante en su familia. Se enteró de una convocatoria para unirse un año después por un correo de la Universidad. Desde que llegó estaba nervioso, había preparado una canción y luego lo invitaron para un ensayo. "Cuando escuché el coro cantar por primera vez, yo me sentía como en las nubes porque escucharlos cantar era maravilloso, verlos moverse era increíble. Era como estar en la película de Disney”.
El momento que más lo impactó después de haber sido aceptado fue que en un mes después había concierto y “tenía que aprenderme canciones en español, italiano, portugués, inglés, quechua, emberá, pero bueno, asumí el reto”. El hecho de incluir lenguas indígenas en su repertorio no es algo de extrañar en este coro. Andrea Zuluaga, coordinadora de Desarrollo artístico y cultural de la Universidad Pontificia Bolivariana, explica que Performance Coral tiene una personalidad muy clara, pues les gusta trabajar mucho el tema de las raíces, del folclore, del contexto y esto los ha llevado a hacer parte de diversas celebraciones tradicionales en pueblos de Antioquia.
Performance Coral es uno de los grupos de proyección de arte de UPB. Dentro de la normativa de educación superior se establece que debe haber acciones de deporte y arte, pero Andrea Zuluaga asegura que la Universidad va más allá del cumplimiento, pues “en el caso de los grupos artísticos, desde Bienestar se coordinan grupos de representación, cada uno cuenta con su director y con este director están en un proceso permanente de aprendizaje y de creación”.
También explica que los grupos de la universidad tienen en reconocimiento a esa dedicación extra, a ese talento que ponen al servicio de la comunidad, unos apoyos en la parte académica que tienen que ver con una matrícula preferencial y en algunos casos, de acuerdo con el desempeño, con un descuento de matrícula. Además, con la intención de mantener viva la creación artística y el interés de los miembros de los grupos se busca que los integrantes tengan siempre voz y voto en los procesos decisorios en conjunto con el director, que está asociado a la Universidad desde Bienestar. Junto a esta dependencia hacen parte de la Asociación Colombiana de Universidades (Ascun), y eso hace que haya ciertos escenarios de participación, como es el caso del VII Festival de coros universitarios de Colmayor.
Un proceso de retos y oportunidades
Carlos Restrepo explica que debido a la virtualidad es necesario replantearse un asunto esencial de los coros: convertir varias voces en una sola. Asegura que hacer esto en la virtualidad es un asunto complejo, pues ninguna en las plataformas de encuentro virtual garantiza que el audio suene en el momento que se emite. Entonces, la imposibilidad de estar en la misma habitación aumenta la responsabilidad individual. Daniel García, uno de los tenores del grupo, concuerda con que eso ha sido de los retos más grandes durante este tiempo.
En los últimos meses estuvieron realizando grabaciones individuales y retroalimentaciones; después de eso se hace un proceso de montaje, en el que el grupo destaca el rol del Centro de Producción Audiovisual. Daniela Arboleda, trabajadora social de UPB y actualmente representante de Performance Coral, establece que nunca va a ser lo mismo un ensayo presencial a un ensayo virtual. Aún así, explica que se presentan cosas bonitas en el proceso: “Más que reinventarse es descubrir e innovarnos en ciertas cosas. Nosotros nunca habíamos hecho este tipo de videos y hacerlos nos une más”. Explica que esto también hace necesario que los integrantes del grupo se adapten a nuevas situaciones.
Joan siente la virtualidad de alguna manera, ha sido una oportunidad, pues “ha demostrado que nosotros más que un grupo somos una familia y que como familia nos apoyamos y ayudamos”. También han tenido que adaptar pequeñas tradiciones, como el hecho de que cuando llegaba una persona nueva se estaban comenzando a acostumbrar a dar un dulce o algo similar. Ahora hacen un aplauso de bienvenida y el director se asegura de que todos participen desde esos primeros espacios.
“Cumplir los sueños más locos”
Los integrantes de Performance Coral destacan que una de las oportunidades más grandes que han tenido como grupo ha sido la visita a Europa, específicamente a Bélgica, Alemania, Italia y España, en diciembre del año pasado. Director e integrantes lo recuerdan como una experiencia significativa, destacando con cariño y nostalgia la conexión y la carga emocional tan fuerte que puede existir en la música folclórica cuando se está lejos del país de origen, así como la posibilidad de conexión que brinda la música independientemente del idioma en el que esté. Carlos Restrepo lo explica así:
Daniel García, por su parte, destaca la posibilidad de tener una formación artística, a pesar del enfoque profesional distinto que puede tener como estudiante de Negocios Internacionales. También, asegura que la oportunidad de conocer lugares distintos con Performance, unidos por la música, le da mucha riqueza al grupo como tal. Asimismo, Daniela Arboleda expresa que el viaje por Europa generó muchas cosechas musicales y experiencias claves para que el coro llegue donde está hoy, pues de alguna manera ayudó a los integrantes a concretar un nivel de responsabilidad, un elemento muy valioso en la virtualidad.
García inició en el coro hace ya tres años y medio después de que la información llegara a su correo institucional. Primero hizo parte únicamente de los talleres de formación que prepara el director Carlos Restrepo, y luego comenzó su proceso en el grupo de proyección. Si bien, la idea de este grupo es buscar y tener escenarios donde presentarse, hay un fuerte y continuo componente de formación. Como lo expresa Joan Mogollón, el director no pide que sean expertos, solo “pasión y dedicación”.
Por su parte, Joan dice que desde que está con performance ha vivido sus sueños más locos: “cantar en un escenario con mucho público, salir del país a hacer algo que amo”. También asegura que su experiencia en este coro lo ha ayudado a cambiar como persona, a mejorar, a ser un poco más sensible hacia los demás, y como es docente en ejercicio, a comprender un poco mejor al ser humano. Para el director, de alguna manera Performance es un punto de partida y un punto de llegada, pues de una manera casi profética cuando era estudiante de UPB dijo regresaría algún día a la Universidad a devolverle todo lo que le estaba dando.
Ahora, se dedica a este espacio al que se refiere como un “laboratorio mágico”, donde estudiantes, profesores y empleados pueden llegar a disfrutar de la experiencia, cantar con el otro y enfrentar un escenario y una puesta en escena como parte de su cotidianidad.
Por Ana Isabel Gómez Molina. Agencia de Noticias UPB – Medellín.
