La telemedicina, beneficios y retos
Agencia de Noticias UPB – Medellín. La telemedicina no es algo nuevo, pero sí ha tomado mayor relevancia con la llegada del COVID-19. Su implementación, gracias a los avances de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC), ha permitido el acceso y mejora de la salud en comunidades de diferentes lugares del mundo.
Ahora, con el coronavirus, su ejecución tiene como objetivo frenar la propagación de esta enfermedad en las consultas médicas, que los pacientes contagiados no la transmitan y los sanos no corran riesgo al acudir a un centro médico; poniéndose a prueba la capacidad virtual, transformándose la asistencia y el tratamiento.
¿Qué es la telemedicina y cuáles son sus ventajas y desafíos?
La telemedicina consiste en el uso de las TIC para proporcionar y apoyar los servicios de atención e información en salud a distancia, empleándose para el diagnóstico, tratamiento, prevención de enfermedades o heridas, gestión de datos clínicos y monitorización o vigilancia, entre otros.
Por otra parte, Juan Felipe Giraldo Noreña, coordinador del CTIC de la Clínica Universitaria Bolivariana, manifiesta que el reto más grande “es el paciente, porque muchos de ellos le tienen desconfianza al proceso, se sienten vulnerados porque están detrás de un teléfono. Otro reto se relaciona con la tecnología y los conocimientos tecnológicos, por ejemplo, un celular que no tenga cámara o datos, o que sea muy lento; o también, hay pacientes que no tienen WhatsApp o correo electrónico”.
La telemedicina tiene un gran potencial, aunque todavía existen barreras para su generalización como la formación, el desarrollo tecnológico, el apoyo económico e institucional, el acceso a las TIC por parte de ciertas poblaciones, la calidad de estas, la aceptación por parte de los médicos y pacientes, y la evaluación de la efectividad y eficiencia de las prácticas en comparación con las tradicionales, entre otras.
¿Cómo está implementando la telemedicina la Clínica Universitaria Bolivariana?
Antes de la aparición del COVID-19, la Clínica tenía como proyecto la telemedicina, pero con la llegada de este, se adelantó el proceso y su implementación. Iniciaron con 5 médicos y proyectan para la siguiente fase 14. Entre las especialidades que se están ofreciendo se encuentran: reumatología, pediatría, programa canguro, psiquiatría y neurología, entre otros.
“Tecnológicamente les instalamos a los médicos un teléfono, un monitor adicional, un computador, diadema y cámara, los equipos que no tenían cámara los cambiamos por portátiles, y creamos un software. En este, se puede hacer la videollamada, ingresar a la historia clínica y al repositorio de documentos del paciente. Por su parte, el paciente tiene la opción de recibir llamada o si es posible videollamada, para esta última se requiere de un teléfono con plan de datos o wifi y cámara, o un computador que tenga cámara, si el paciente no cuenta con estas dos opciones, toca hacer llamada telefónica”, explicó Juan Felipe.
Cuando iniciaron con esta estrategia de medicina a distancia, el 50 % de los pacientes estuvieron a favor y para la fecha está en 70 % – 80 %. Y por parte de los médicos también ha sido buena la recepción de la telemedicina, mencionó el coordinador del CTIC de la Clínica Universitaria Bolivariana.
La telemedicina ha abierto nuevas puertas “de hecho, ya ajustamos el proyecto de tal forma que, no solo nos quedemos en telemedicina, sino en teleasistencia, tele-experticia (que no solo un médico vea al paciente, sino que lo puedan ver dos, para garantizar la seguridad en el tratamiento que se le vaya a dar) y también, el telemonitoreo (hacerles un registro y control a los pacientes desde la comodidad de su casa). La telemedicina en la Clínica, nos está permitiendo que no solamente nos quedemos con una teleconsulta o telemedicina, sino a brindarle una atención 360 al paciente”, sostuvo Juan Felipe Giraldo Noreña.
Por Allison Nathalia Jaramillo Chavarría, Agencia de Noticias UPB - Medellín.
