Arte hecho por jóvenes en Tierra de extraños
Agencia de Noticias UPB - Medellín. Más allá de la teoría tan amplia que hay alrededor del arte, Camilo Londoño, docente de la Escuela de Ciencias Sociales de la UPB, quiso que sus estudiantes pudieran interiorizar y resolver la mejor forma de expresar sus ideas a través de la diversidad de lenguajes y expresiones artísticas.
Sus siete estudiantes de Comunicación Social-Periodismo decidieron ir más allá de las tradicionales entregas finales. Evolucionaron sus proyectos un semestre después de terminado el curso Imagen I y los presentaron en la exposición Tierra de Extraños que, del 4 al 16 de mayo, pudo ser apreciada por los espectadores de la Sala de Exposiciones Antonio Mesa Jaramillo del campus Laureles.
La exposición trata sobre otras formas de reconocer los fenómenos sociales y cómo, basados en las vanguardias artísticas, los estudiantes pudieron crear un relato de lo marginal, de lo oculto y lo obtuso.
“Ellos no tenían conocimientos previos, yo solo les di las bases en composición, teorías del color y muchos más temas, pero se la jugaron con lo que pudieron por sacar adelante sus ideas”, expresa Camilo, quien también ha sido curador de arte.
Entre las obras se destaca el stencil, la fotografía, el grabado, las instalaciones, el video arte y matices de las expresiones que han marcado a los entornos urbanos desde el siglo XX: “Todos ellos manifestaron que no sabían dibujar o pintar. Cuando en el curso llegamos a las vanguardias comprendieron que si tenían un mensaje que querían comunicar, el arte podía prestarse como su mejor medio de difusión”.
Las obras
Rayando los espacios más sucios y caóticos de la ciudad con su plantilla para pintar con la técnica stencil en forma de rosa, Sara Molina se pregunta “por qué la sociedad tecnológica actual de producción y consumo no hace algo por preservar el medio ambiente”.
Aunque para muchos la rosa de su dibujo parece más bien el logo del partido de las FARC, su trabajo viene desde mucho antes que el exgrupo guerrillero tomara como símbolo esta flor. Según Camilo, es válido que la gente tenga esta asociación, porque el conflicto armado también es una realidad que para muchos es oculta.
La fotografía se torna un elemento para reconocer la intimidad en la obra de Manuela Sierra, así como en la de Julián Cardona donde pone a sus espectadores a pensar sobre el poder de la cultura pop en la formación de individuos y masas, o Alma Flórez con la irrupción de los términos hombre y mujer en una degustación de imagen y texto a través de poemas de Walt Withman.
Valentina Castro y su “Destrucción teórica” genera una reflexión sobre la dependencia del hombre actual en objetos tecnológicos como el celular, la calculadora y en el tiempo con el reloj ¿facilitan la vida o generan dependencia? Por su parte, Mateo Ramírez, con su instalación, critica las épocas venideras a la ilustración: violencia y consumo; quizás, según Camilo, quien más expresa la verdadera idea de la “Tierra de Extraños”.
Reflejo de los sentimientos
Las dicotomías del sujeto con sus emociones es la experiencia que ofrece la instalación de Santiago Rendón llamada “Tirar hacia adentro”. Con catorce espejos que van, según su concepto, acordes con sentimientos puestos en acrílico, el estudiante busca que el asistente genere su propia reflexión de cómo se observa en cada emoción.
“Puse los espejos en el piso para que haya exploración, que la persona encuentre las dicotomías con sentimientos que pueden ser buenos o malos con una caligrafía distinta. Mi trabajo representa esa lucha interior de todos los humanos”, expone Santiago quien agradece a Camilo por permitirle aventurarse en el arte, algo que pensó nunca iba explorar.
Por Jorge Andés Jaramillo - Agencia de Noticias UPB
